La primera vez que hice helado casero fue sin receta. Solo fresas, coco y un impulso de libertad.
Recuerdo las mañanas de verano en el mercado, con mi abuela caminando lento pero firme entre los puestos de fruta. Siempre elegía las fresas más pequeñas, decía que eran las más dulces. Me enseñó que la cocina no era para impresionar, sino para reunir. Para que alguien se quede un rato más en la mesa, para que la conversación no se corte. Que un postre podía ser una excusa para volver.
Este helado de fresa cremosa tiene ese espíritu: ingredientes sencillos, sin pretensiones, pero con esa magia que hace que todos pregunten si hay más. Es un recordatorio de que lo simple también puede ser especial.
Ahora sí, pongámonos prácticas… pero sin perder lo poético.
Ingredientes para el helado de fresa cremosa
Frutos rojos congelados (1 taza): base frutal rica en antioxidantes y vitamina C; aportan color intenso y ese dulzor ácido característico.
Banano congelado en rodajas (1 unidad): da cremosidad natural y dulzor sin azúcar añadida; aporta potasio y fibra soluble.
Leche de almendras (1–2 cdas): ayuda a iniciar el licuado y ajustar la densidad; sabor suave y baja en calorías.
Extracto de vainilla (½ cdta): realza los sabores y aporta un aroma cálido que equilibra la acidez de los frutos.
Miel de agave (1–2 cdas): endulzante líquido que se integra fácilmente; úsala al gusto según la madurez del banano.
Proteína vegetal en polvo (1 scoop): aumenta el aporte proteico y la saciedad; contribuye a una textura más cremosa.
Yogurt griego de coco, congelado en cubitera (½ taza): añade cremosidad densa y un toque ácido vegetal que resalta los sabores; ayuda a espesar.
Toppings — semillas de chía (1 cda), mantequilla de nueces (1 cda) y fruta fresca (al gusto): suman fibra, grasas saludables, omega-3 y contraste de textura.
¿Cómo hacer helado de fresa cremosa?
Procedimiento
Carga la licuadora: agrega primero los líquidos (leche de almendras, vainilla y agave), luego los frutos rojos, el banano, la proteína y, al final, los cubitos de yogurt de coco.
Licuado controlado: comienza en baja y sube gradualmente a alta.
Pausa técnica (≈ 40–50 s): detén la licuadora, raspa paredes con una espátula y empuja la mezcla hacia las cuchillas.
Termina la textura: vuelve a licuar hasta obtener una mezcla espesa, cremosa y homogénea. Si la licuadora no avanza, añade 1 cda extra de leche de almendras cada vez hasta que gire (evita excederte para no perder espesor).
Sirve y decora: vierte en un bowl, alisa la superficie y añade toppings (chía, mantequilla de nueces y fruta fresca). Consume de inmediato.
OPCIÓN A: Con máquina de helado
Lleva la mezcla al refrigerador en un recipiente apto para congelador y deja enfriar por 2 horas.
Luego sigue las instrucciones de tu máquina de helado para mantecar.
OPCIÓN B: Sin máquina
Coloca toda la mezcla en un recipiente con tapa apto para congelador.
Congela durante 1 hora, luego bátelo ligeramente cada 20 minutos por 3 o 4 horas.
Una vez tenga consistencia de helado, sirve con cuchara. Si está muy duro, deja reposar 5-10 minutos antes de servir.
Tips extra:
Este helado de fresa cremosa es vegano y sin gluten.
Puedes sustituir el jarabe de arce por miel de agave, o usar eritritol líquido si deseas una versión keto.
¿No tienes crema de coco? Aprende a hacerla en casa con nuestra guía de leches vegetales.
Equipo necesario para preparar helado de fresa cremosa
Licuadora o procesador de alimentos potente
Recipiente apto para congelador con tapa
Cuchara para helado
Espátula
(Opcional) Máquina de helado
Tabla de compuestos bioactivos
Análisis de compuestos bioactivos del helado de fresa cremosa
Fresas congeladas: ricas en antocianinas (pigmentos antioxidantes), vitamina C y fibra. Apoyan el sistema inmune, mejoran la salud de la piel y son naturalmente bajas en calorías.
Crema de coco: contiene MCTs (triglicéridos de cadena media) que el cuerpo usa como energía rápida, sin almacenarlos como grasa. El ácido láurico también tiene propiedades antimicrobianas.
Jarabe de arce: aporta minerales como manganeso y zinc, junto con polifenoles antioxidantes. Es una alternativa más natural al azúcar refinada.
Vainilla: su componente activo, la vanilina, tiene efecto relajante y antioxidante. Aporta aroma y profundidad sin sumar calorías vacías.
Información nutricional estimada (por 1/2 taza)
Calorías: 160 kcal
Grasas: 11 g
Carbohidratos: 15 g
Azúcares: 8 g (naturales)
Proteína: 1.5 g
Fibra: 2 g
Recomendaciones de almacenamiento del helado de fresa cremosa
Recipiente ideal: Congela en un recipiente hermético apto para congelador.
Duración recomendada: hasta 2 semanas para mantener la mejor textura y sabor.
Tip para servir: Si está muy duro al sacarlo, deja reposar de 5 a 10 minutos a temperatura ambiente antes de servir.



