No te desesperes aun las refrigeradoras de última generación pueden convertirse en un caos, si no tomamos en cuenta los cuatro aspectos más importantes:
- Seguridad alimentaria
- Espacio y funcionalidad
- Durabilidad y conservación de los alimentos
- La planificación de un menú
A todos nos ha pasado que regresamos del supermercado con un mar de bolsas llenas de víveres y nos topamos con que no hay espacio donde colocarlos y terminamos empujándolos donde quepan.
Pero para empezar, antes de ir de compras un buen tip es dejar tu refri limpia y desechar todo lo que ya no vas a utilizar.
Independientemente del diseño de refrigeradora que tengas es muy aconsejable contar con contenedores plásticos cuadrados o rectangulares para poder almacenar los alimentos por categorías.
Algunos refrigeradores cuentan con congelador vertical, otros con gavetas grandes en su base y las más tradicionales con el congelador instalado en la parte superior. Algunos traen gavetas para embutidos y las gavetas para vegetales, es recomendable usar cada espacio para lo que fue diseñado ya que esta distribución a sido calculada por los fabricantes para mantener la temperatura apropiada para cada alimento.
Pero iniciemos con el tema principal, salud alimentaria.
Para prevenir problemas como intoxicaciones alimenticias debemos conocer el término contaminación cruzada, lo cual significa que un alimento posee sus propios gérmenes y se puede transmitir a otro alimento si están en contacto, por ejemplo el pollo es bien sabido que trae salmonelas y si lo ponemos a la par de un pescado que vamos a comer crudo en un sushi, aparte de que el pescado le va a transmitir el olor y el sabor al pollo, el pollo lo va a contaminar con la salmonela. Por esa razón es muy importante que las carnes se almacenen en contenedores cerrados plásticos y separados.
La carne de res, los mariscos y las aves no deben tener contacto entre sí y esto se puede solucionar con cajas plásticas, cuyo tamaño va a depender de la cantidad que compremos de cada una. Y pueden ser alineadas o apiladas en los distintos diseños de congeladores.
Otro aspecto importante si acostumbras a dejar descongelando carnes en la parte de enfriamiento es que nunca se deben colocar encima de alimentos ya preparados o vegetales que se van a comer crudos, porque al gotear los van a contaminar, por esa razón se aconseja ponerlos en la sección más baja de la refrigeradora.
También es muy importante que si se derrama algún líquido limpiarlo inmediatamente, y siempre chequear que la temperatura se mantenga en 4 grados centígrados.
Porciona tus carnes
Es recomendable porcionar las carnes en bolsas separadas, para no descongelar y volver a congelar
Sobras,
se pueden guardar en contenedores pequeños con tapadera, y por ejemplo pueden ser reutilizadas en una omelette al día siguiente.
Y si deplano no las vas a consumir desecharlas o bien regalarlas a alguien que pueda aprovecharlas antes de que se echen a perder y solo te ocupen más espacio.
Espacio y funcionalidad
Si cuentas con una gaveta para vegetales y otra para frutas, asegurate que los vegetales más sólidos queden el fondo y los más blandos como el tomate queden encima, ya que la presión pudre los vegetales.
Si no tienes una gaveta especial para almacenar hierbas u hojas verdes puedes colocarlas en una caja cuadrada abierta para que no queden apretadas.
La idea de las cajas cuadradas es que casan muy bien alineadas o apiladas y evitan los espacios muertos para ahorrar espacio, lo cual no sucede con contenedores redondos o cuando la base es más pequeña que la parte superior.
Mejor si son transparentes para ver qué contienen.
Y hablando de la puerta de tu refri, la puedes aprovechar para productos envasados no pesados que se pueden clasificar:
Salsas y aderezos
Jaleas y conservas
lácteos como yogurts, crema, etc
te va a ayudar a visualizar lo que ya tienes para que no dupliques tus compras, o para que no termines abriendo un envasado nuevo cuando ya tienes uno en uso.
Conservación
Para prolongar la conservación de hojas verdes y hierbas puedes guardarlas previamente desinfectadas, se secan y se envuelven con una manta húmeda bien exprimida o papel tipo periódico húmedo.
Si compras vegetales que vienen en bandejas emplasticadas, es importante perforar el plástico para que tengan respiración
Si tienes champiñones los puedes almacenar en una bolsa plástica con agujeros y si empiezan a oxidarse se sumergen en agua con vinagre.
El retoño de soya puede conservarse muy bien, fuera de la bolsa plástica metido en agua fría.
Cuando la verdura viene muy sucia y con tierra lo ideal es lavarla antes, pero si lavas antes debes cuidar de secarla muy bien, ya que el exceso de humedad hace más propensa a descomponerse más rápido.
La idea de conservar los alimentos en frascos o tupperwares es para conservarlos más frescos y por más tiempo y preferiblemente si son de vidrio, aunque existen contenedores de tupperware diseñados para la buena ventilación y conservación de las hojas verdes.
Ventajas de la planificación de un menú
Cuya planificación va a depender de qué tan seguido te guste o te convenga ir a hacer tus compras de supermercado, aunque es recomendable que no sea más de dos semanas.
Los alimentos se van a consumir más frescos
No vas a desperdiciar espacios por almacenar alimentos que a largo plazo vas a terminar tirando porque se vencieron o porque ya no están frescos
Porque cuando acumulas alimentos los vas desplazando al punto que terminas olvidandote que los tienes, mientras que si tienes un plan te obliga a buscar y usar lo que necesitas para tu menú del día.
Además del beneficio para la organización de tu refri , la planificación te va a ayudar en tu economía y en lograr tus metas para una alimentación balanceada y saludable.